Productos típicos - Importación exportación

Los cerdos ibéricos Brisa poseen unas características peculiares que los distinguen notablemente del resto, dando como resultado productos Ibéricos de máxima calidad. Son ejemplares con historia genética, cuyo origen radica en una subespecie mediterránea del Sus Scrofa Mediterraneus, autóctonos de las famosas dehesas españolas, principalmente localizadas en Salamanca. El proceso de Salación En Ibéricos Brisa, todos las piezas se cubren con sal marina para favorecer la deshidratación y conservación de las mismas, contribuyendo así al desarrollo del color y aromas típicos de los productos curados. Permanecen en la cámara de salazón un día por cada kilo de peso de la pieza fresca, a una temperatura controlada, entre 3º y 5º centígrados, y con una humedad relativa entre el 75% y 85%. Un producto con múltiples beneficios para la salud Todos los productos Ibéricos Brisa son el resultado de un proceso de producción artesanal, sin alérgenos, sin colorantes, sin lactosa ni gluten

Producto elaborado con la extremidad posterior procedente de cerdos adultos sometida al correspondiente proceso de salazón y curación-maduración. Los cerdos ibéricos Brisa Los cerdos ibéricos Brisa poseen unas características peculiares que los distinguen notablemente del resto, dando como resultado productos Ibéricos de máxima calidad. Son ejemplares con historia genética, cuyo origen radica en una subespecie mediterránea del Sus Scrofa Mediterraneus, autóctonos de las famosas dehesas españolas, principalmente localizadas en Salamanca. El proceso de Salación En Ibéricos Brisa, todos las piezas se cubren con sal marina para favorecer la deshidratación y conservación de las mismas, contribuyendo así al desarrollo del color y aromas típicos de los productos curados. Permanecen en la cámara de salazón un día por cada kilo de peso de la pieza fresca, a una temperatura controlada, entre 3º y 5º centígrados, y con una humedad relativa entre el 75% y 85%.

Producto elaborado con la extremidad posterior procedente de cerdos adultos sometida al correspondiente proceso de salazón y curación-maduración. Los cerdos ibéricos Brisa Los cerdos ibéricos Brisa poseen unas características peculiares que los distinguen notablemente del resto, dando como resultado productos Ibéricos de máxima calidad. Son ejemplares con historia genética, cuyo origen radica en una subespecie mediterránea del Sus Scrofa Mediterraneus, autóctonos de las famosas dehesas españolas, principalmente localizadas en Salamanca. El proceso de Salación En Ibéricos Brisa, todos las piezas se cubren con sal marina para favorecer la deshidratación y conservación de las mismas, contribuyendo así al desarrollo del color y aromas típicos de los productos curados. Permanecen en la cámara de salazón un día por cada kilo de peso de la pieza fresca, a una temperatura controlada, entre 3º y 5º centígrados, y con una humedad relativa entre el 75% y 85%.

Producto elaborado con la extremidad anterior (incluyendo pata y hueso) procedente de cerdos adultos sometida al correspondiente proceso de salazón y curación-maduración. Los cerdos ibéricos Brisa Los cerdos ibéricos Brisa poseen unas características peculiares que los distinguen notablemente del resto, dando como resultado productos Ibéricos de máxima calidad. Son ejemplares con historia genética, cuyo origen radica en una subespecie mediterránea del Sus Scrofa Mediterraneus, autóctonos de las famosas dehesas españolas, principalmente localizadas en Salamanca. El proceso de Salación En Ibéricos Brisa, todos las piezas se cubren con sal marina para favorecer la deshidratación y conservación de las mismas, contribuyendo así al desarrollo del color y aromas típicos de los productos curados. Permanecen en la cámara de salazón un día por cada kilo de peso de la pieza fresca, a una temperatura controlada, entre 3º y 5º centígrados, y con una humedad relativa entre el 75% y 85%.

Producto elaborado con la extremidad anterior (incluyendo pata y hueso) procedente de cerdos adultos sometida al correspondiente proceso de salazón y curación-maduración. Los cerdos ibéricos Brisa Los cerdos ibéricos Brisa poseen unas características peculiares que los distinguen notablemente del resto, dando como resultado productos Ibéricos de máxima calidad. Son ejemplares con historia genética, cuyo origen radica en una subespecie mediterránea del Sus Scrofa Mediterraneus, autóctonos de las famosas dehesas españolas, principalmente localizadas en Salamanca. El proceso de Salación En Ibéricos Brisa, todos las piezas se cubren con sal marina para favorecer la deshidratación y conservación de las mismas, contribuyendo así al desarrollo del color y aromas típicos de los productos curados. Permanecen en la cámara de salazón un día por cada kilo de peso de la pieza fresca, a una temperatura controlada, entre 3º y 5º centígrados, y con una humedad relativa entre el 75% y 85%.

Producto elaborado con la extremidad anterior (incluyendo pata y hueso) procedente de cerdos adultos sometida al correspondiente proceso de salazón y curación-maduración. Producto elaborado con la extremidad anterior (incluyendo pata y hueso) procedente de cerdos adultos sometida al correspondiente proceso de salazón y curación-maduración. Los cerdos ibéricos Brisa Los cerdos ibéricos Brisa poseen unas características peculiares que los distinguen notablemente del resto, dando como resultado productos Ibéricos de máxima calidad. Son ejemplares con historia genética, cuyo origen radica en una subespecie mediterránea del Sus Scrofa Mediterraneus, autóctonos de las famosas dehesas españolas, principalmente localizadas en Salamanca. El proceso de Salación En Ibéricos Brisa, todos las piezas se cubren con sal marina para favorecer la deshidratación y conservación de las mismas, contribuyendo así al desarrollo del color y aromas típicos de los productos curados. Permanecen en la cámara

Producto elaborado con la extremidad anterior, cortada a nivel de la escapula humeral hasta el humero radial, con mano y hueso, procedente de cerdos adultos sometida al correspondiente proceso de salazón y curación-maduración. Los cerdos ibéricos Brisa Los cerdos ibéricos Brisa poseen unas características peculiares que los distinguen notablemente del resto, dando como resultado productos Ibéricos de máxima calidad. Son ejemplares con historia genética, cuyo origen radica en una subespecie mediterránea del Sus Scrofa Mediterraneus, autóctonos de las famosas dehesas españolas, principalmente localizadas en Salamanca. El proceso de Salación En Ibéricos Brisa, todos las piezas se cubren con sal marina para favorecer la deshidratación y conservación de las mismas, contribuyendo así al desarrollo del color y aromas típicos de los productos curados. Permanecen en la cámara de salazón un día por cada kilo de peso de la pieza fresca, a una temperatura controlada

Producto elaborado con la extremidad anterior (incluyendo pata y hueso) procedente de cerdos adultos sometida al correspondiente proceso de salazón y curación-maduración. Los cerdos ibéricos Brisa Los cerdos ibéricos Brisa poseen unas características peculiares que los distinguen notablemente del resto, dando como resultado productos Ibéricos de máxima calidad. Son ejemplares con historia genética, cuyo origen radica en una subespecie mediterránea del Sus Scrofa Mediterraneus, autóctonos de las famosas dehesas españolas, principalmente localizadas en Salamanca. El proceso de Salación En Ibéricos Brisa, todos las piezas se cubren con sal marina para favorecer la deshidratación y conservación de las mismas, contribuyendo así al desarrollo del color y aromas típicos de los productos curados. Permanecen en la cámara de salazón un día por cada kilo de peso de la pieza fresca, a una temperatura controlada, entre 3º y 5º centígrados, y con una humedad relativa entre el 75% y 85%.

Producto elaborado con la extremidad anterior procedente de cerdos adultos sometida al correspondiente proceso de salazón y curación-maduración. Los cerdos ibéricos Brisa Los cerdos ibéricos Brisa poseen unas características peculiares que los distinguen notablemente del resto, dando como resultado productos Ibéricos de máxima calidad. Son ejemplares con historia genética, cuyo origen radica en una subespecie mediterránea del Sus Scrofa Mediterraneus, autóctonos de las famosas dehesas españolas, principalmente localizadas en Salamanca. El proceso de Salación En Ibéricos Brisa, todos las piezas se cubren con sal marina para favorecer la deshidratación y conservación de las mismas, contribuyendo así al desarrollo del color y aromas típicos de los productos curados. Permanecen en la cámara de salazón un día por cada kilo de peso de la pieza fresca, a una temperatura controlada, entre 3º y 5º centígrados, y con una humedad relativa entre el 75% y 85%.

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