Es 2018 el año en el que la situación evoluciona positivamente y el país llega a situarse por encima de la media en Europa (casi 20 puntos) en su uso de energías renovables. La energía total proveniente de estas fuentes verdes aumentó un 18,6 % respecto a 2017 (datos de la Red Eléctrica de España), cumpliendo así con los Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos en la Agenda 2030 de las Naciones Unidas.
Si avanzamos en el tiempo, podemos destacar que en el año 2021 las energías renovables produjeron en España hasta el 46,6 % de la electricidad, mientras que el 2023 posiciona a España en su año más verde de la historia. Esto marca un antes y un después, ya que se produjeron más de 135 000 GWh a través de energías limpias. Estas energías verdes, que utilizan recursos naturales como el viento, el sol o el agua para producir electricidad y evitar así el uso de los contaminantes combustibles fósiles, predominan en España en forma de energía eólica y solar o fotovoltaica debido a los numerosos recursos naturales del país.
Impulso económico de las energías renovables
Detrás del éxito de las energías renovables en España se encuentran empresas como BP, Enel (propietaria de Endesa), Iberdrola o Total Energies, siendo estas tres últimas las compañías que más operan en nuestro territorio junto a fondos de inversión extranjeros. Según el BOE, existen más de 200 proyectos de energía limpia tras los que se encuentran unas 60 empresas, de las cuales, la mayor parte del capital invertido es extranjero, lo que hace presuponer el gran interés en España geográficamente desde el punto de las energías verdes.
El peso de los proyectos que nuestro país tiene previstos en materia de energía verde se traduce en megavatios (MW), de los cuales se quieren desplegar 60 000 en nuevas renovables hasta 2030. Esto supondría tres veces más la cantidad de megavatios de 2020 (nos encontramos actualmente en 31 000 MW solares y eólicos autorizados).
Con estos ambiciosos propósitos a largo plazo, se desata una “carrera” entre empresas, petroleras, multinacionales, eléctricas y fondos de inversión, donde la creciente importancia de las renovables ha hecho que el precio de la electricidad en España sea el más competitivo de Europa.
Económicamente, se tendrá que considerar sin embargo el tema de la excedencia de energía, especialmente la solar, pues en determinados periodos hace que sus productores se vean obligados a venderla a precios muy bajos si no son capaces de almacenarla de alguna manera. Aquí entra en juego la opción del almacenamiento a través de baterías y otras técnicas que ya se encuentran en proceso de desarrollo e investigación.
Perspectivas: potencial de expansión en España y escenario futuro
Tras haber conseguido ser uno de los primeros países en generar más de la mitad de su electricidad con energía renovable en 2023, el siguiente paso para España es cumplir sus objetivos para 2030 y convertirse en una economía circular y neutra en emisiones de carbono. Para cumplir con estos objetivos, España seguirá centrada en sus ya elementos fundamentales, más parques eólicos (terrestres y marinos) y más plantas fotovoltaicas, lo que augura un buen futuro de transición energética para nuestro país. De este modo, se dependería cada vez menos de los combustibles fósiles y, por tanto, de otros Estados.
Si bien existen trabas sociales y legales en el camino, es importante apuntar que España cuenta con una base ya favorable que parte de su posición geoestratégica privilegiada y de la cantidad de sol (con más horas de luz que ningún otro país de la Unión Europea) y la fuerza del aire y del agua. Se puede decir que España es el “hub energético de Europa”.
Tan favorable podría considerarse la posición de España respecto al asunto energético, que una de las preocupaciones actuales llega a ser la excedencia en producción eléctrica. Este aspecto que a priori puede parecer positivo, resulta delicado en materia económica y de precios y pone sobre la mesa el importante debate sobre los diferentes sistemas de almacenamiento, crucial para el desarrollo de las energías renovables no solo en España sino a nivel mundial.