Qué son los criterios ESG

En la actualidad, cada vez tiene un mayor valor el esfuerzo de las empresas por lograr un impacto positivo en el mundo. En esta línea, los criterios ESG (del inglés environmental, social and governance) son aquellas posiciones que adoptan las organizaciones para declararse sostenibles en los aspectos ambientales, sociales y de gobernanza.

Y dada su importancia, estos criterios están pasando a ser requisitos indispensables para las empresas europeas y españolas en particular. De este modo, se pretende promover una forma de hacer negocios sostenible que priorice el impacto en el planeta al crecimiento económico masivo.
 

El panorama normativo en España en materia de ESG

Según el informe Perspectivas España 2023: ESG de KPMG, el 72 % de los empresarios españoles ha revisado su estrategia ESG o va a hacerlo en este ejercicio. Esta tendencia la impulsan factores como el mayor escrutinio de los grupos de interés y la convicción de que estos ámbitos contribuyen al crecimiento de la organización, pero también la mayor exigencia de la normativa.

En España, el marco normativo con respecto a la imposición de requisitos ESG ha experimentado cierto avance y, mediante diferentes normas, va reflejando el creciente reconocimiento de la importancia de la sostenibilidad en el ámbito empresarial. En la mayoría de los casos, estas leyes parten de la iniciativa de la propia Unión Europea.

Concretamente, en España podemos destacar diferentes instrumentos legales en este sentido:

  •  Ley 11/2018, de 28 de diciembre en materia de información no financiera y diversidad: se trata de la trasposición de la Directiva UE 2014/95/UE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 22 de octubre de 2014, sobre Divulgación de Información no Financiera (NFRD, por su siglas en inglés) que revolucionó los criterios de declaración e información en sostenibilidad.
  •  Ley 7/2021, de 20 de mayo, de cambio climático y transición energética: esta ley establece requisitos que deben cumplir los organismos a la hora de publicar informes. Deben incluir los riesgos de su actividad, marcar objetivos específicos y de descarbonización, así como, de forma optativa, calcular sus emisiones y compensarlas.
  •  Ley 2/2023 reguladora de la protección de las personas que informen sobre infracciones normativas y de lucha contra la corrupción: se centra en la buena gobernanza y, para ello, entre otras medidas, obliga a las empresas de más de 50 personas empleadas a disponer de un sistema interno de información con denuncias e investigaciones que puede consultar la autoridad competente.

Sin embargo, la mayor novedad en cuanto a los avances normativos llegó con la Directiva de Informes de Sostenibilidad Corporativa (CSRD), que entró en vigor el 5 de enero de 2023 y que reemplaza y amplía el alcance de los requisitos de presentación de informes de sostenibilidad de la NFRD con una mayor transparencia y consistencia.

 

Los retos en España en materia de ESG

Si bien tras la pandemia se observó cierta reactivación de la economía europea y española, la actualidad está marcada por grandes factores como la guerra de Rusia y Ucrania y la elevada inflación generalizada. Además, los cuellos de botella en las cadenas de suministro y el aumento de los precios energéticos empezaron a generar incertidumbre. Sin duda, todo esto afecta a la inversión sostenible y a los esfuerzos de las empresas por incorporar los criterios ESG.

El estudio de mercado La inversión sostenible y responsable en España de Spainsif de 2022 refleja que los activos gestionados con criterios ESG crecen menos de lo que lo hacen los activos totales. Según el estudio, la legislación en materia de finanzas sostenibles sigue manteniéndose como las principales palancas de las finanzas sostenibles para la mayoría de las entidades participantes.

Además de estos factores que suponen un reto, cabe señalar los desafíos en términos de estandarización y cumplimiento uniforme. La armonización de estándares mediante normas más específicas, como la nueva CSRD de la UE, son pasos cruciales para perfilar un marco robusto y coherente que impulse la adopción generalizada de los criterios ESG y las prácticas empresariales sostenibles en España y Europa.
 

La solución pasa por el uso de la tecnología

A pesar del menor grado de optimismo con respecto a la evolución de la inversión sostenible en el futuro, fruto de la incertidumbre económica, el clima general es positivo para el largo plazo. Y la solución a los retos actuales a los que se enfrentan las empresas pasa por el uso de la tecnología.

Aprovechando estratégicamente soluciones innovadoras como las plataformas de análisis de datos avanzados y los sistemas de inteligencia artificial, se puede obtener ayuda en la recopilación, evaluación y presentación de informes de manera eficiente y precisa sobre el impacto de sus operaciones en términos ambientales, sociales y de gobernanza.

Además, la tecnología facilita la automatización y simplificación de procesos, algo esencial en departamentos como el de compras en contextos de costes elevados y cuellos de botella en las cadenas de suministro. De este modo, las empresas pueden fortalecer su posición competitiva, abordar los desafíos que plantea la adopción de los criterios ESG y avanzar en el proceso hacia la responsabilidad y la sostenibilidad. Porque como puso de manifiesto Rodrigo Buenaventura, presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, la inversión socialmente responsable ya no tiene vuelta atrás.